La historia de Aaron
El comienzo de Aaron no fue fácil. Nació con varias discapacidades, incluida la parálisis cerebral, y enfermedades que exigen equipos médicos, tecnología e insumos. Se alimenta a través de un tubo gástrico; se le hizo una traqueotomía y suele necesitar el uso de un respirador. Pasó directamente del hospital a un centro para niños con problemas de salud cuando apenas tenía un par de semanas. Su madre trató de llevarlo a casa varias veces, pero estaba sobrepasada por sus necesidades y la falta de apoyo. No podía sola y lo llevó nuevamente a un centro de cuidado. La vida de ella era inestable y se mudaba con frecuencia. La vida de Aaron también era inestable y lo mudaban de un centro a otro. Cuando tenía 11 años, había vivido en tres instituciones.
EveryChild se comunicó con la madre de Aaron para alentarla a que analice la posibilidad de que Aaron viva con una Familia de Apoyo. El personal de EveryChild conocía a Barbara, una enfermera pediátrica que vivía cerca de la madre de Aaron y podía ser una candidata perfecta. Barbara ya había trabajado en un asilo en el que cuidó niños. Creía que los niños eran más felices y más saludables si vivían en familia, y decidió abrir las puertas de su casa a los niños que de otro modo crecerían en asilos.
EveryChild concertó un encuentro entre la madre de Aaron y Barbara. Barbara le ofreció su hogar y su corazón a Aaron. Después de 11 años de vivir en hogares, Aaron se mudó con Barbara y se convirtió en parte de su familia. Barbara describió que vivir con Aaron la hacía sentirse realizada, tanto como ella lo hacía sentirse a él.
“Encaja como si siempre hubiera estado aquí. No podría ser más feliz”.