La historia de Joey
La familia de Joey estaba en crisis. Cuando Joey, de 8 años y con autismo, no gritaba, golpeaba o mordía a los miembros de su familia, lloraba. No comía. La familia no sabía qué hacer. En un mes, Joey fue a la sala de emergencias cuatro veces.
Desesperada por recibir ayuda, la madre de Joey se comunicó con una institución para ver si podía llevarlo allí. El personal sabía que este centro no era el entorno adecuado para Joey. Pero conocían a EveryChild y conectaron a la familia con ellos.
EveryChild informó a la madre de Joey acerca de otras opciones. dele dieron a conocer la posibilidad de compartir la crianza con una Familia de Apoyo. Le gustó que Joey siguiera viviendo en familia. Podía visualizar de qué manera ambas familias podían apoyarse para satisfacer sus necesidades intensivas. Y sintió que vivir con una Familia de Apoyo podía darle a su familia la posibilidad de rearmarse después de meses de crisis.
Joey se mudó con una Familia de Apoyo genial y afectuosa. Desarrollamos un plan junto con profesionales que incluyó servicios de apoyo conductual.
Ambas familias aprendieron estrategas que podían usar para que Joey estuviera más cómodo. Joey empezó a mejorar y pudo regresar a su hogar. Ahora su madre puede visualizar un futuro mejor para su hijo y su familia.